Miro el corazón y no me detengo en su aspecto. Voy más adentro, allí donde el alma se desvela y se muestra sin miedo. No hay juicio ni condena. La opinión importa menos. Y sí el amor verdadero.
Padre ; me ayuda tanto con sus reflexiones, Dios le bendiga y le regale muchos dones más, para sus fieles que se alimentan de la meditación de la palabra con la ayuda de Usted. Paz y bien.
Gracias
Padre ; me ayuda tanto con sus reflexiones, Dios le bendiga y le regale muchos dones más, para sus fieles que se alimentan de la meditación de la palabra con la ayuda de Usted. Paz y bien.