Quiero una mirada pura para pensar siempre bien de los que caminan conmigo. Para confiar en que Dios es capaz de hacer milagros con mi barro humilde. Yo le creo. Y lo miro asombrado.
«Yo soy el camino, la verdad y la vida», «Yo soy la luz del mundo». Un Padrecito nos enseñó que en el momento de consagración, uno con esos gestos, al arrodillarse, se da cuenta de que vino Dios. Bendiciones.Gracias Padrecito por todo, Feliz 2016.
El otro dia en la homilia de la misa del gallo, el sacerdote decia que el primero que debio arrodillarse ante el niño, seguro que fue un pastor con su obeja en brazos, porque representaba el mismo Jesús llevandonos a nosotros ante El. Me gusto intuir también, que en ese gesto Jesús también se arrodillaba frente a la família. Tan sencillo como bonito. Es El el que nos lleva frente a la pequeñez.
«Yo soy el camino, la verdad y la vida», «Yo soy la luz del mundo». Un Padrecito nos enseñó que en el momento de consagración, uno con esos gestos, al arrodillarse, se da cuenta de que vino Dios. Bendiciones.Gracias Padrecito por todo, Feliz 2016.
El otro dia en la homilia de la misa del gallo, el sacerdote decia que el primero que debio arrodillarse ante el niño, seguro que fue un pastor con su obeja en brazos, porque representaba el mismo Jesús llevandonos a nosotros ante El. Me gusto intuir también, que en ese gesto Jesús también se arrodillaba frente a la família. Tan sencillo como bonito. Es El el que nos lleva frente a la pequeñez.
Gracias por esta profunda homilía